Con el retiro de manifestantes en Vinto, Colomi, y otros tramos estratégicos, vías de Cochabamba, Potosí y Santa Cruz vuelven a estar habilitadas, aunque permanecen escombros y tierra en el lugar.

Grupos alineados con Evo Morales han decidido levantar de forma temporal los bloqueos en diversas rutas del país, entre ellas el tramo Sucre-Llallagua en Potosí y la carretera Bioceánica en Santa Cruz. Tras abandonar los puntos de bloqueo, las vías quedaron obstaculizadas con escombros, promontorios de tierra y piedras, dificultando la circulación pese a la retirada de los manifestantes.

En el municipio de Vinto, en Cochabamba, aproximadamente 20 funcionarios realizan labores de limpieza en los puentes Kora I y Kora II para despejar las rutas y garantizar el tránsito en la zona, según información de medios locales. En Colomi, los bloqueos fueron levantados en vísperas de la festividad de Todos Santos, después de que organizaciones afines a Morales determinaran un cuarto intermedio.

Sin embargo, se reportaron tácticas peligrosas en otras zonas; entre Ivirgarzama y Villa Tunari, manifestantes radicales colocaron fierros puntiagudos en el asfalto, con el propósito de dañar las llantas de los vehículos que intenten cruzar. En Santa Cruz, la Policía Boliviana intervino para persuadir a los bloqueadores en la carretera Bioceánica, logrando que los manifestantes en San José de Chiquitos liberen temporalmente la vía hasta el próximo lunes, 4 de noviembre.

En el tramo Llallagua-Sucre, los movilizados aceptaron liberar la vía como una “pausa solidaria”, permitiendo el paso hasta el 10 de noviembre. Sin embargo, en varias áreas del país los bloqueos persisten y suman ya 18 días de protesta, dejando incomunicadas importantes rutas que conectan Cochabamba con otras regiones de Bolivia.