En una actuación poco convincente del equipo refinero, los dirigidos por Venegas sufrieron una derrota por 3-1 durante su visita a Trinidad.

El enfrentamiento, disputado en Trinidad, se vio afectado desde el principio por la lluvia persistente, convirtiendo la cancha en un lodazal impracticable para el fútbol de alto nivel. A esto se sumó la falta de iluminación en el recinto.

La afición de Oriente Petrolero no pudo contener su indignación, en medio de las quejas, los seguidores expresaron su malestar por el desempeño del equipo en condiciones tan adversas y criticaron abiertamente las decisiones del árbitro que condujeron a la expulsión del capitán del equipo, Caire.

"Es un escándalo el robo en el Beni, se juega en una cancha que no está para jugar ni estando seca", expresaron furiosos los hinchas a través de las redes sociales. Las redes sociales se inundaron de mensajes críticos hacia la gestión del club y su aparente indiferencia ante las difíciles condiciones en las que los jugadores tuvieron que competir.

El resultado final, un contundente 3-1 a favor de Libertad Gran Mamore, no hizo más que agudizar la herida en el orgullo de Oriente Petrolero. Además, la cantidad de tarjetas rojas mostradas durante el partido, incluyendo dos para el equipo cruceño, dejó un sabor amargo entre los jugadores y la afición.