La Federación de Juntas Vecinales (FEJUVE) de todos los distritos de Santa Cruz, junto a mototaxistas y la Federación de Chóferes, protagonizaron una marcha hasta las oficinas de YPFB (Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos) para exigir una pronta solución al desabastecimiento de combustible que afecta a la región.

El presidente de la FEJUVE, Orlando Peña, lideró la protesta, que tuvo como punto principal la solicitud urgente al Gobierno nacional para que se normalice el suministro de gasolina y diésel, productos vitales para el funcionamiento del transporte y otras actividades económicas. Durante la movilización, los manifestantes también expresaron su rechazo al alza de los pasajes, situación que agrava aún más la situación económica de los ciudadanos.

Peña, quien entregó una carta a los representantes de YPFB, indicó que el Gobierno se comprometió a recibirlos en un plazo máximo de 24 horas. "Si no obtenemos una respuesta positiva, tomaremos las instalaciones de YPFB", advirtió Peña, dejando claro que la situación ya ha alcanzado un punto crítico.

La marcha fue acompañada por fuertes consignas de los transportistas, quienes han sufrido el impacto directo del desabastecimiento, con largas filas en las estaciones de servicio y una grave afectación en los horarios de transporte público y privado.