Teresa Ribera, vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea y responsable de la cartera de Transición Limpia, Justa y Competitiva, llegará a Bolivia para participar en los actos oficiales de la transmisión de mando presidencial y la posesión de Rodrigo Paz Pereira como presidente constitucional para el periodo 2025–2030.

La alta funcionaria europea permanecerá en el país entre el 6 y el 8 de noviembre, en una visita que combina diplomacia política, cooperación internacional y promoción de inversiones sostenibles. Su presencia reafirma el respaldo de la Unión Europea (UE) al proceso democrático boliviano y al compromiso del nuevo gobierno con una agenda de transición ecológica y desarrollo sostenible.

Además de asistir a los actos protocolares del 8 de noviembre en La Paz, Ribera participará en el foro empresarial “Bolivia Visión 2025”, donde presentará la estrategia Global Gateway, iniciativa europea destinada a movilizar inversión privada y pública para proyectos de energía limpia, infraestructura sostenible y digitalización en la región.

Se prevén reuniones bilaterales con altas autoridades del Gobierno entrante, representantes del cuerpo diplomático, sociedad civil, académicos y mujeres legisladoras. La visita ocurre meses después de la presencia de una Misión de Observación Electoral de la UE en los comicios generales, reforzando el compromiso europeo con el fortalecimiento institucional y el desarrollo democrático del país.

El presidente electo Rodrigo Paz ha destacado que su gabinete priorizará la reconstrucción económica, la cooperación internacional y el impulso a mercados verdes, objetivos que se alinean con la agenda climática promovida por Bruselas.

Ribera es una figura central en las políticas de transición ecológica europeas. Antes de asumir en la Comisión Europea fue vicepresidenta del Gobierno de España y ministra para la Transición Ecológica. También participó en las negociaciones del Acuerdo de París sobre el clima y es reconocida por su trabajo en resiliencia climática y cooperación internacional.

En el marco del Bicentenario de Bolivia, la llegada de Ribera tiene un componente simbólico y estratégico: consolida el acercamiento entre Bolivia y la Unión Europea en materia de desarrollo verde, transición energética y reinserción internacional.