El número de personas fallecidas debido a las intensas lluvias que azotan Bolivia ascendió a 11, con el hallazgo reciente de un adolescente en Santa Cruz.

Este trágico deceso eleva la cifra de víctimas en el país, que sigue siendo afectado por los fuertes fenómenos climáticos.

La víctima, un joven de 13 años, cayó a un canal de drenaje el lunes durante una lluvia intensa en la ciudad de Santa Cruz, siendo arrastrado por la corriente.

El viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, había informado inicialmente que el número de fallecidos era de 10, pero la nueva víctima de Santa Cruz sumó una nueva fatalidad al trágico balance.

El adolescente, que estaba parado en un puente del octavo anillo de la avenida Libertadores, en la Villa Primero de Mayo, fue arrastrado por el agua luego de caer al canal. Se están investigando las circunstancias exactas del suceso.

A nivel nacional, el desglose de las víctimas es alarmante. Cochabamba reporta cuatro muertes, incluyendo a personas alcanzadas por mazamorras y desbordes.

Chuquisaca registra tres fallecimientos, mientras que La Paz y Tarija suman un caso cada uno.

El último informe también menciona la desaparición de una mujer en el río Tacata de Quillacollo, lo que sigue siendo un caso abierto de búsqueda.

Ante la magnitud de los desastres, Calvimontes ha indicado que se están tomando medidas de respuesta inmediata.

Se movilizan equipos de rescate y asistencia humanitaria en las zonas más afectadas, con especial atención en el municipio de Villa Tunari, donde la mazamorra ha dejado graves consecuencias.

Además, la maquinaria pesada está siendo utilizada para mitigar los efectos de las lluvias.

El viceministro también resaltó el compromiso de la Gobernación de Santa Cruz, cuyos equipos de rescate lograron recuperar el cuerpo del adolescente en el canal de drenaje.

Los trabajos de evaluación de daños continúan, y se brindará apoyo a las familias afectadas por la tragedia.

Por otro lado, las autoridades siguen realizando esfuerzos para mejorar la infraestructura de drenaje y prevención de desastres en las áreas más vulnerables del país.

La coordinación con los municipios y las fuerzas de seguridad es crucial para la atención de emergencias y la prevención de futuras tragedias.

La situación sigue siendo grave en varios departamentos del país, y las autoridades instan a la población a mantenerse alerta, especialmente en zonas de alto riesgo, como puentes, ríos y canales.

Las lluvias no cesan, y el monitoreo continúa para evitar mayores tragedias.