La comunidad de Cochabamba se encuentra consternada tras el hallazgo del cuerpo de Benigna Arze Villarroel, una joven de 25 años que había sido reportada como desaparecida desde hace casi una semana. Su cadáver fue encontrado en Villa Hermosa, una localidad ubicada a cuatro horas de Villa Tunari, donde residía.

Benigna, madre de dos niños de 8 y 10 años, habría sido asesinada por su concubino, David José Q., quien estaba siendo buscado por la Policía. Según el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV) de Cochabamba, Freddy Vargas, el hallazgo fue reportado por los dirigentes del Sindicato San Juan de Icoya el 20 de octubre. Los agentes de la FELCV se dirigieron al lugar, realizaron el levantamiento del cuerpo y lo trasladaron a la morgue del hospital de Villa Tunari.

La autopsia reveló que Benigna sufrió asfixia por estrangulación y presentaba múltiples contusiones. Desde ese momento, el personal de la FELCV y un equipo de Inteligencia han estado trabajando para localizar al principal sospechoso, de 28 años.

Con este trágico caso, Benigna se convierte en la víctima número 17 de feminicidio en Cochabamba y la 75 en todo Bolivia este año. La lista de víctimas en Cochabamba incluye a otras mujeres, como Katherine Márquez (42), Hilda Ticona (39) y Justina Clemente (24), entre otras. Lamentablemente, los últimos cuatro casos se descubrieron en octubre.

El feminicidio de Benigna ha dejado a sus hijos sin una madre, y las investigaciones sobre este crimen continúan. La comunidad clama por justicia en un ambiente de creciente preocupación por la violencia de género en el país.