El último mercado de verano dejó una tendencia clara: los laterales se han convertido en una de las posiciones más cotizadas del fútbol moderno.

Según datos de TransferRoom, tanto los laterales derechos como los izquierdos registraron un costo medio de traspaso de 5,6 millones de euros, ubicándose entre las tres posiciones más caras del mercado, solo por detrás de los extremos, cuyo valor promedio fue de 6,5 millones.

El lateral izquierdo fue la posición que más incrementó su valor con respecto al mercado anterior, con un aumento del 139%. En segundo lugar se ubicaron los extremos, con un 94%, y luego los laterales derechos, con un 86%.

Este auge responde, en parte, a la evolución táctica del fútbol y al papel determinante que muchos entrenadores han otorgado a los defensores de banda. El Liverpool de Klopp marcó una nueva era con Trent Alexander-Arnold como pieza clave de su sistema, mientras que Pep Guardiola y Mikel Arteta han desarrollado variantes con los laterales invertidos, como Zinchenko y Lewis-Skelly.

El PSG también ha tenido un papel decisivo en esta tendencia. Bajo la dirección de Luis Enrique, el conjunto parisino conquistó la Champions League con Nuno Mendes y Achraf Hakimi como protagonistas, consolidando la figura del lateral como una pieza fundamental en los esquemas modernos y elevando su valor en el mercado internacional.