«¡No disparen contra los niños!»: las palabras de una monja arrodillada frente a militares en Birmania

En Birmania, una monja logró parar al ejército y a los policías luego de implorarles que no matarán a los niños.
«¡No disparen contra los niños!», les dijo la hermana, Ann Rose Nu Twang, y suplicó a voz fuerte «Dispárame a mí, no a los niños».
La religiosa, se plató sobre sus rodillas y dos policías hicieron lo mismo, juntando sus manos en señal de respeto por la religiosa.
«Les supliqué que no dispararan, que en lugar de ello me mataran a mí. Levanté las manos en señal de perdón», dijo la monja al medio AFP.
También comentó ante los periodistas de Reuters: «Escuchamos fuertes disparos y vimos que la cabeza de un niño había explotado y había un río de sangre en la calle… Fue un momento de pánico. Estaba en medio y no podía hacer nada». Pero aseguró que «no tenía miedo».