El aceite de oliva, conocido por sus beneficios para la salud, se ha convertido en un ingrediente esencial en muchas cocinas. Su consumo se asocia comúnmente con una alimentación saludable y se ha sugerido que puede contribuir a la pérdida de peso y, en particular, a la reducción de la grasa abdominal. Pero, ¿qué hay de cierto en estas afirmaciones?.

A pesar de ser un aceite vegetal altamente calórico, el aceite de oliva, especialmente el extra virgen, se considera una opción saludable en comparación con otros aceites. Contiene grasas saludables que protegen contra las enfermedades cardiovasculares, como lo demostró un estudio realizado por Marta Guasch-Ferre de la Harvard University. Según este estudio, las personas que consumen más aceite de oliva tienen menos riesgo de morir a causa de enfermedades cardiovasculares.

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) señala que una alimentación saludable debe incluir grasas saludables, y el aceite de oliva es una de las principales fuentes de estas grasas, junto con los frutos secos, el aguacate y el pescado.

Además de ayudar a perder peso, se ha comenzado a recomendar el consumo de aceite de oliva para quemar la grasa abdominal, que está relacionada con la resistencia a la insulina y el alto nivel de colesterol LDL. Sin embargo, la evidencia científica en este sentido es menos concluyente. Mientras algunos estudios sugieren que el aceite de oliva puede favorecer la redistribución de la grasa abdominal, no está claro que reduzca directamente la grasa en esta área.

El consejo general para quemar la grasa abdominal sigue siendo una combinación de alimentación saludable y ejercicio físico. Mantenerse activo a lo largo del día y dedicar tiempo a la actividad física, como el entrenamiento de fuerza, son fundamentales para reducir el exceso de grasa visceral. En resumen, aunque el aceite de oliva tiene beneficios para la salud en general, la pérdida de grasa abdominal depende de una estrategia más completa que incluye una alimentación saludable y actividad física regular.