La Federación de Empresarios Privados de La Paz (FEPLP) ha anunciado su decisión de utilizar criptoactivos en transacciones comerciales tras el levantamiento de las restricciones impuestas anteriormente.

Rolando Kempff, presidente de la organización, destacó que esta medida no solo facilitará el comercio nacional, sino que también promoverá el desarrollo económico del país.

La iniciativa surge después de que el Banco Central de Bolivia, en coordinación con la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) y la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF), revocara la Resolución 144 del 15 de diciembre de 2020, que prohibía el uso y la negociación de criptoactivos en el sistema de pagos nacional.

Kempff subrayó que el uso de criptoactivos representa una alternativa valiosa para las transacciones comerciales en Bolivia, aprovechando las ventajas del sistema de pagos digital a través de la web y otros medios tecnológicos.

Este cambio regulatorio, según explicó, facilitará el movimiento económico y comercial al ofrecer nuevas herramientas financieras que pueden agilizar y simplificar las transacciones empresariales y comerciales en el país.

La Resolución de Directorio 084/2024 del Banco Central, emitida el 25 de junio, refleja un cambio significativo en la política financiera boliviana al reconocer la utilidad práctica de los activos digitales, especialmente en un contexto donde las transacciones al exterior han disminuido drásticamente.

Edwin Rojas, presidente del Banco Central, destacó que los criptoactivos pueden ser particularmente útiles para las familias y comerciantes que realizan transferencias internacionales de bajo monto, facilitando la recuperación de los niveles de operaciones previos a la prohibición.

Sin embargo, Rojas también enfatizó los riesgos asociados con los criptoactivos, como la posibilidad de pérdidas y estafas, instando a los usuarios a tomar decisiones responsables al momento de utilizar estos activos digitales.

Es importante destacar que los criptoactivos no constituyen moneda de curso legal en Bolivia y, por lo tanto, no deben considerarse como dinero en efectivo, sino como una herramienta digital complementaria para facilitar transacciones económicas dentro y fuera del país.

Este cambio en la política financiera boliviana representa un paso significativo hacia la adaptación de nuevas tecnologías en el sector económico, proporcionando a los empresarios y comerciantes nuevas oportunidades para diversificar sus operaciones y mejorar la eficiencia en el manejo de transacciones comerciales.