La Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) ha manifestado su alarma y extrema preocupación ante la decisión tomada por el Gobierno Nacional y la Central Obrera Boliviana (COB) de aumentar el salario mínimo nacional en un 5.85% y el haber básico en un 3%. Estos porcentajes, considerablemente superiores al índice de inflación del año pasado (2.12%), han generado inquietud en el sector empresarial debido a su posible impacto en la estabilidad económica del país.

La CEPB sostiene que esta determinación, tomada en un contexto de incertidumbre económica, tendrá consecuencias graves para las empresas, especialmente las pequeñas y medianas, así como para las familias que dependen de la actividad privada formal. Se lamenta la exclusión del sector privado en el análisis de los efectos de este incremento salarial desproporcionado, así como la falta de cumplimiento de convenios internacionales vinculantes ratificados por Bolivia.

Se señala la intransigencia de la COB para considerar las razones del sector empresarial, lo que no solo afectará a las empresas, sino que también podría aumentar la precarización del empleo y perjudicar la inversión pública subnacional y la economía en general.

Los empresarios reafirman su compromiso de cumplir con la ley, pero advierten que muchos negocios podrían enfrentar dificultades para asumir este aumento salarial, especialmente teniendo en cuenta su carácter retroactivo.

Por último, la CEPB exige que la responsabilidad por las consecuencias negativas de este incremento recaiga en quienes tomaron la decisión, y no en aquellos que no participaron en el proceso de toma de decisiones.