En plena era digital, cuando los celulares parecen prácticamente una extensión del cuerpo, Escocia apuesta por un giro radical que consiste en evitar su uso en las aulas.

En un video que se viralizó en las redes sociales se observa a estudiantes de una unidad educativa bloquear personalmente sus dispositivos antes de ingresar a las aulas.

Esto ocurrió en una unidad educativa de Escocia donde entregan fundas especiales para sus celulares, que al momento de acercarlas a un dispositivo en la pared, bloquea la señal de los teléfonos.

Esta decisión forma parte de una nueva guía oficial impulsada por el gobierno escocés que busca dar respaldo a las escuelas que decidan limitar o prohibir el uso de teléfonos móviles.

Según la secretaria de Educación, Jenny Gilruth, los directores están “facultados para tomar medidas hasta e incluso prohibiciones a nivel escolar completo” para combatir los efectos negativos del uso excesivo de estos dispositivos.

Los resultados iniciales han sido positivos: según medios como BBC y STV News, se observa una mejora en la concentración, la participación en clase y la interacción entre los alumnos.

Aunque algunos padres se muestran preocupados por posibles emergencias, se han previsto excepciones para quienes necesitan tener su celular por razones médicas o familiares.

La iniciativa nace tras reportes preocupantes, un estudio del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) reveló que un tercio de los estudiantes en Escocia se distraen por el celular durante casi todas las clases.

Además, según la Asociación Escocesa de Profesores, el mal uso de estos dispositivos ha facilitado casos de acoso escolar, afectando tanto a alumnos como al personal docente.