Lucy Humprey sufrió muchos años un cuadro médico de lupus bastante complejo que afectaba a sus dos riñones, incluso su médico de cabecera le dijo que le quedaban pocos años de vida. El lupus es una afección que causa inflamación en el corazón, los pulmones, el hígado, las articulaciones y por su puesto los riñones, los cuales le comenzaron a fallar. Un fin de semana decidió ir a la playa con su pareja sentimental, estacionaron su autocaravana frente al mar y prepararon una parrillada acompañados de sus perros. "Indie se acercó a esta mujer llamada Katie que estaba a unos cien metros de distancia" cuenta Lucy "Seguía yendo y viniendo a donde ella estaba y nosotros la llamábamos una y otra vez para que regresara a donde estábamos, porque obviamente un dóberman grande puede ser un poco intimidante". Cenydd, su novio, le explicó a Katie que Lucy no podía beber porque estaba sometiéndose a diálisis, a lo que Katie respondió “¡ Acabo de entrar en el registro de donación de riñón!” Así fue como esta inspiradora historia se desarrolló con un final feliz, en el que Lucy recibió el riñón de Katie, quien, luego de hacerse los análisis correspondientes, resultó ser una donante perfecta.