Leonardo DiCaprio, uno de los actores más respetados de Hollywood, recordó un momento clave que marcó el rumbo de su exitosa carrera: su casting junto a Robert De Niro en El enemigo (1993).

Aunque su primer papel fue en Critters 3 (1991), un debut modesto, fue su interpretación de Arnie en ¿A quién ama Gilbert Grape? (1993) la que realmente lo catapultó a la fama. Sin embargo, fue su trabajo junto a De Niro lo que consolidó su lugar en la industria del entretenimiento.

En una reciente entrevista, DiCaprio confesó que ese casting con De Niro fue el que definió su carrera, al destacar la influencia que el actor tuvo sobre él en sus primeros años.

Tras ese trascendental encuentro, DiCaprio se unió al director Martin Scorsese para una serie de colaboraciones exitosas, que cimentaron su estatus como una de las grandes estrellas de Hollywood.

La relación con Scorsese, junto a su vínculo con De Niro, ha sido clave para su crecimiento profesional, llevando a DiCaprio a protagonizar películas aclamadas por la crítica a lo largo de las décadas.

Su regreso a trabajar con De Niro en Los asesinos de la luna de las flores (2023) fue un hito más en su carrera, recordando el impacto que tuvo ese primer trabajo juntos.

Para DiCaprio, el reencuentro con De Niro no solo representó un regreso a las pantallas, sino también un recordatorio de la importancia de las relaciones profesionales que forjan una carrera. A lo largo de su trayectoria, el actor ha tenido varios momentos de "círculo completo", pero este regreso a trabajar junto a De Niro es uno de los más significativos de su vida profesional.