El exdiputado Miguel Morón denunció que el trópico de Cochabamba se ha convertido en un fortín impenetrable bajo el control de Evo Morales, comparándolo con los carteles de Sinaloa o Ciudad Juárez.

Según Morón, el ingreso al Chapare está condicionado al permiso de los seguidores de Morales, quienes actúan como agentes de migración y bloquean el paso de quienes intentan transitar por la zona.

El dirigente también resaltó la similitud de esta situación con las historias de narcotraficantes y carteles, una analogía que comparó con la serie de Netflix o la historia del narcotraficante Pablo Escobar. Sin embargo, lejos de ser una ficción, Morón subraya que se trata de una triste y vergonzosa realidad para el país.

Morón señaló que Evo Morales ha logrado eludir la Justicia y esconderse en este territorio, pese a las órdenes de aprehensión en su contra por delitos de pedofilia. La denuncia acusa al Gobierno Nacional y a la Policía de convertirse en cómplices, al no tomar medidas para ejecutar la orden de captura por los abusos sexuales imputados a Morales.

El exlegislador pidió una intervención inmediata en el Chapare, calificándolo de una “republiqueta” que debe ser controlada para devolver la paz y el orden social a la región cochabambina. De acuerdo con Morón, la situación actual de impunidad en la zona refleja el nivel de descomposición y corrupción que está presente en las estructuras de poder.

Morón hizo un llamado a las autoridades nacionales para que actúen con firmeza y no sigan tolerando esta situación que, según él, amenaza la seguridad, el orden y la justicia en el país. La denuncia sigue generando un amplio debate sobre el control territorial y la impunidad en el país.