Este martes, Rusia y Estados Unidos alcanzaron un acuerdo durante conversaciones celebradas en Riad, Arabia Saudita, con el objetivo de mejorar las relaciones diplomáticas entre ambos países. Según el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, el principal punto de entendimiento fue garantizar la pronta designación de embajadores en las respectivas legaciones diplomáticas.

Lavrov detalló que ambos países acordaron que sus viceministros coordinarían una reunión para abordar las barreras que han dificultado el funcionamiento adecuado de las embajadas y demás delegaciones diplomáticas. "Nuestro objetivo es superar los obstáculos artificiales que han afectado las relaciones entre nuestras naciones", explicó el canciller ruso.

El ministro acusó a la administración del presidente estadounidense Joe Biden de obstaculizar el trabajo de las misiones diplomáticas rusas, mencionando la expulsión de diplomáticos rusos y la confiscación de propiedades diplomáticas en Estados Unidos. Estas medidas, que se remontan a la presidencia de Barack Obama, han llevado a Rusia a tomar represalias similares.

Las relaciones entre ambos países se deterioraron tras la anexión de Crimea por parte de Rusia en 2014, y el conflicto en Ucrania marcó una ruptura aún más profunda. Sin embargo, las recientes conversaciones en Riad, que duraron más de cuatro horas, abren una ventana para la reconciliación y la búsqueda de soluciones a la crisis ucraniana.

La delegación rusa estuvo encabezada por Lavrov, junto con Yuri Ushakov, asesor del presidente Vladimir Putin, y Kiril Dmítriev, director del fondo soberano ruso. En representación de Estados Unidos, participaron el secretario de Estado Marco Rubio, el asesor de seguridad nacional Mike Waltz y el enviado especial para Oriente Medio, Steve Witkoff.

Este encuentro marcó la primera reunión de alto nivel entre funcionarios de ambos países desde el encuentro de Lavrov con el secretario de Estado Antony Blinken en enero de 2022, antes del inicio de la guerra en Ucrania. Por su parte, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, advirtió que cualquier acuerdo relacionado con Ucrania debe contar con el consentimiento de su gobierno y sin ser tratado sin la participación de sus aliados europeos.