La Sociedad Boliviana de Neumología, encabezada por su presidente Marco Antonio García, ha expresado una seria preocupación por la crisis ambiental actual provocada por los incendios y el humo en el país.

García destacó que la persistente nube de humo no solo afecta a quienes tienen enfermedades respiratorias preexistentes, como asma o bronquitis, sino que también está generando molestias generales como picazón en los ojos y ardor en la garganta.

El chaqueo de bosques está intensificando la contaminación del aire, que puede descompensar a personas con problemas de salud y provocar efectos graves a largo plazo.

García explicó que los efectos inmediatos de la humareda incluyen irritaciones oculares y respiratorias, mientras que los impactos a largo plazo pueden ser tan severos como la fibrosis pulmonar, similar a los daños causados por el tabaquismo.

La falta de respuesta efectiva de las autoridades ha llevado a la Sociedad de Neumología a recomendar medidas preventivas a la población, como el uso de mascarillas, la reducción de actividades al aire libre y la monitorización de la calidad del aire.

Tarija es el departamento más afectado, con la contaminación del aire obligando a la suspensión de actividades escolares y el retorno a clases virtuales.

García hizo un llamado a utilizar la tecnología para monitorear la calidad del aire y destacó que los niveles de contaminación en La Paz alcanzaron cifras preocupantes, como los 190 puntos, superando el nivel respirable normal de 150.