Pedrazas pide a nuevas autoridades judiciales rechazar a “autoprorrogados”
El diputado de Comunidad Ciudadana (CC), Marcelo Pedrazas, hizo un llamado este jueves a los magistrados y consejeros electos en las recientes elecciones judiciales del 16 de diciembre a exigir la renuncia de las autoridades “autoprorrogadas”.
Según el legislador, no hacerlo sería perpetuar una justicia “podrida” y sin cambios reales. “El 2 de enero de 2025 serán posesionadas las nuevas autoridades del Órgano Judicial. Si bien habrá renovación en el Tribunal Supremo y Agroambiental, el Tribunal Constitucional es clave por la coyuntura política del país”, expresó Pedrazas.
El contexto de estas declaraciones se enmarca en la Sentencia Constitucional 0770/2024, que declaró desiertas las elecciones en varios departamentos para el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP).
Esto obligó a una prórroga temporal de las actuales autoridades judiciales hasta la posesión de las nuevas.
Pedrazas recordó que, durante la campaña, los magistrados electos prometieron abordar la renuncia de los “autoprorrogados” y garantizar el cumplimiento constitucional que estipula el cese de sus funciones una vez elegidos los nuevos cargos. “Solo dos magistrados electos tienen más legitimidad que toda esa sala plena de autoprorrogados”, enfatizó.
El diputado advirtió que, si para el 5 de enero las nuevas autoridades no cumplen con sus promesas, se evidenciará que la justicia sigue en manos de personas interesadas únicamente en beneficiarse del cargo. “Los bolivianos han depositado su confianza en ellos, y su primer desafío es garantizar una justicia transparente, cumpliendo con la Constitución y las leyes”, añadió.
El proceso de renovación del Órgano Judicial enfrenta desafíos adicionales, ya que la Asamblea Legislativa aún debe aprobar una ley que permita continuar con las elecciones en los departamentos donde no se realizaron votaciones.
Además, las reglas electorales impiden realizar dos procesos en un mismo año, lo que podría complicar el cronograma para 2025, un año marcado por elecciones presidenciales.