Un grupo de 27 bufeos bolivianos, delfines de río únicos en el país, fueron salvados tras quedar aislados en cuerpos de agua desconectados del Río Grande, en el municipio de San Pedro, Santa Cruz. La operación se llevó a cabo entre el 21 y 25 de junio con la participación de varias instituciones y voluntarios.

El rescate fue liderado por el Museo de Historia Natural Noel Kempff Mercado, junto a la Gobernación de Santa Cruz, bomberos voluntarios, organizaciones ambientales y el apoyo de la comunidad. Los animales, entre ellos hembras, crías y juveniles, fueron trasladados a un afluente conectado nuevamente al río. También se salvaron 17 tortugas acuáticas.

Previo a su liberación, los bufeos recibieron chips de identificación para su seguimiento. Uno de los delfines ya había sido registrado años atrás, lo que demuestra la efectividad del monitoreo.

Pese a no contar con financiamiento fijo, el programa de conservación sigue adelante gracias al compromiso de voluntarios y la colaboración de entidades públicas y privadas. Los biólogos esperan que este tipo de esfuerzos tenga mayor respaldo para proteger a la especie.