El fuego arrasa áreas protegidas de gran valor ecológico en Santa Cruz.

Los incendios forestales afectan al Área Natural de Manejo Integrado (ANMI) San Matías y al Área de Conservación Ñembi Guasu, hogar de especies como el jaguar.

La falta de combustible y los fuertes vientos dificultan el trabajo de más de 150 personas entre guardaparques, bomberos y militares desplegados en la zona.

El incendio comenzó el domingo en Roboré y se extendió hacia Charagua, que declaró desastre municipal y activó su COE para coordinar acciones.

El director del Sistema Autonómico de Áreas Protegidas de Charagua Iyambae, José Ávila, informó que realizan sobrevuelos con el Comando Militar de Aviación y esperan que el ingreso de un frente frío ayude a frenar el avance de las llamas.

En San Matías, la emergencia también es crítica.

La escasez de diésel impide movilizar maquinaria pesada, pues solo cuentan con un surtidor en la zona, lo que obliga a largas filas de hasta cuatro días.

Según el subgobernador de la provincia Ángel Sandoval, Luis Miguel Carracedo, se requieren entre 600 y 800 litros diarios para las operaciones.

Las llamas se extienden por varios frentes, incluyendo comunidades como San Miguelito y áreas próximas a El Carmen Rivero Torrez y Santo Corazón.

Mientras tanto, guardaparques del Noel Kempff Mercado también piden apoyo, ya que sus campamentos están en áreas de difícil acceso y dependen de transporte aéreo para abastecerse.