La Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) ha denunciado públicamente que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) está exigiendo a las aerolíneas internacionales el pago del combustible de aviación en dólares estadounidenses, amenazando con suspender el suministro si no se cumple esta exigencia.

Sin embargo, el ministro de Obras Públicas, Edgar Montaño, ha rechazado estas acusaciones, asegurando que se había acordado previamente que el pago se realizaría en bolivianos. Montaño ha indicado que el tema ya se había resuelto con el Ministerio de Hidrocarburos y que se habían enviado las comunicaciones correspondientes.

"Es un tema que ya con mucha anticipación lo resolvimos. Yo me reuní con el ministro de Hidrocarburos y no se va a cobrar en absoluto nada en dólares", afirmó Montaño en una conferencia de prensa.

Por su parte, la IATA ha expresado su preocupación por esta situación, ya que considera que la exigencia de pago en dólares pone en riesgo la conectividad aérea del país y afecta negativamente al sector turístico y comercial. Peter Cerdá, vicepresidente regional de IATA para las Américas, ha señalado que esta medida podría tener un impacto significativo en la economía boliviana.

Además de esta disputa, la IATA ha denunciado que el Estado boliviano mantiene bloqueados 42 millones de dólares de las aerolíneas, lo que ha generado una mayor tensión entre ambas partes.

Ante esta situación, el ministro Montaño ha anunciado una reunión en La Paz con representantes de la IATA, el Ministerio de Economía, la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) y la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban) para abordar el tema y buscar una solución.