El sector del transporte pesado reporta que las filas de camiones y vehículos que buscan diésel se han vuelto tan extensas que se cruzan en una misma vía, lo que ha provocado robos durante la espera.

Héctor Mercado, representante del sector, indicó que actualmente hay hasta 250 camiones por surtidor y que la situación genera pérdidas económicas significativas.

Los transportistas aseguraron que muchas veces deben dormir en los vehículos y enfrentar riesgos mientras esperan para abastecerse. La falta de diésel afecta también a diversos sectores productivos que dependen del combustible para operar.

El Gobierno informó que dos buques con carburantes llegarán al puerto de Arica entre el 7 y el 13 de septiembre, cuando se prevé descargar los líquidos para atender la alta demanda interna.