La ministra de Salud y Deportes, Maria Renée Castro, repudió los actos de violencia registrados en los bloqueos que afectan diversas zonas del país, principalmente en Cochabamba, donde personal médico y pacientes fueron agredidos física y psicológicamente. Según la autoridad, varios equipos fueron interceptados mientras cumplían labores de emergencia, incluso recibiendo golpes y amenazas.

Uno de los casos más alarmantes ocurrió en la zona de Vinto, donde una ambulancia que trasladaba a una paciente de 77 años con pancreatitis aguda fue atacada por manifestantes. La doctora que la acompañaba fue agredida, y aunque se permitió continuar el trayecto, la salud de la paciente se deterioró, obligando su derivación a una clínica privada en Quillacollo.

Otro hecho grave involucró a una madre con su bebé recién nacido, afectado por ictericia, quienes fueron obligados a descender de la ambulancia por bloqueadores que impidieron el paso del vehículo. “Les dijeron que, si querían atención, caminen”, relató Castro, visiblemente consternada.

Durante la jornada del miércoles también se reportó la retención de 11 personas, entre ellas 10 médicos y un chófer, en la localidad de Pajo, ruta a Caracollo. Todos fueron víctimas de maltrato, y uno de los galenos presenta traumatismo craneal y posible fractura nasal.

La ministra condenó estos hechos, calificándolos como un “atentado contra la vida y la dignidad”, y anunció acciones legales. Reiteró que la atención médica continúa pese a las adversidades e hizo un llamado a la conciencia de quienes bloquean caminos: “El paciente en esa ambulancia podría ser su hijo, su madre o su esposa”.