Médicos colegiados y sindicalizados se pronuncian en contra del anteproyecto de ley que busca imponer la jubilación obligatoria a los 65 años de edad. La medida, que ha generado fuertes críticas, ha llevado al presidente del Colegio Médico Departamental, Wilfredo Anzoátegui, a expresar su preocupación por los posibles impactos negativos en la estabilidad económica de los profesionales.

Anzoátegui sostiene que la propuesta legislativa afecta no solo a los médicos, sino a todos los trabajadores, destacando la singularidad de la medicina, donde la formación más la especialización demandan un extenso período de 12 años. Según él, la aplicación de esta normativa limitaría el tiempo disponible para que un profesional pueda consolidar su carrera y estabilidad financiera.

El secretario de Conflicto del Fesirmes, Evert Patiño Miranda, hace un llamado a un análisis más detallado de la medida, subrayando el papel fundamental que desempeñan muchos médicos como formadores de nuevos profesionales y como pilares científicos en el ámbito médico.

Patiño Miranda informa que, en respuesta a esta situación, el Fesirmes ha establecido un comité de crisis para evaluar posibles medidas de presión, no descartando la posibilidad de un paro movilizado. "Pedimos a los diputados y senadores que reconsideren este proyecto de ley", enfatiza.