La Princesa Leonor, acompañada por sus 560 compañeros de primer curso, ha recibido un sable que simboliza su futura posición como oficial del Ejército. Este acto, uno de los más tradicionales de la Academia General Militar, marcó un hito al ser el primero en el que participaron los alumnos de nuevo ingreso y simbolizó la obtención de sus títulos de caballero o dama cadete.

La Princesa Leonor, quien comenzó su formación militar el 18 de agosto en la Academia General Militar, será la primera mujer en ostentar el mando supremo de las Fuerzas Armadas en el futuro, siguiendo los pasos de su padre y su abuelo, el rey emérito. Su carrera militar se extenderá durante tres años en distintos ejércitos, y para ello, la Academia General Militar ha desarrollado un plan de estudios específico.

En el acto, presidido por el General de Brigada Manuel Pérez López, director de la Academia General Militar, los cadetes de segundo curso entregaron los sables de oficial a la nueva promoción de caballeros y damas cadetes, incluyendo a la Princesa Leonor. Según la página web de la Academia, este gesto simboliza la relación de compañerismo y tutela que debe existir entre los veteranos y los nuevos cadetes.

Durante la ceremonia, los cadetes número uno de las LXXXII y LXXXIII promociones pronunciaron discursos en los que destacaron la vida de servicio, dedicación, entrega y abnegación que han elegido, así como su firme compromiso de enfrentar la rigurosidad de la vida militar con el propósito de convertirse en los oficiales que encarnan el "espíritu de La General", un elemento común y de cohesión de todos los oficiales formados en la Academia.

La Princesa Leonor continuará su formación realizando dos cursos en uno en Zaragoza, posteriormente se trasladará a la Escuela Naval de Marín (Pontevedra), donde se embarcará como guardamarina en el buque escuela Juan Sebastián Elcano, y finalmente, al año siguiente, a la Escuela del Aire de San Javier (Murcia) para recibir un adiestramiento integral.

Con esta ceremonia, la Princesa Leonor da un paso más en su camino hacia su futuro papel como líder de las Fuerzas Armadas de España, mientras continúa honrando la rica tradición de la Academia General Militar de Zaragoza.